Juntos tendrían la oportunidad de ser felices por fin…
El cirujano Fergus Reynard abandonó la gran ciudad para ejercer la medicina general en Cradle Lake, con la esperanza de poder superar allí un terrible golpe. Desde luego, las risas, la dedicación y el afecto de la doctora Ginny iban a serle de mucha ayuda.
Ginny sabía que no podía comenzar una relación con aquel maravilloso hombre si antes no superaba sus propios problemas. Pero Fergus no iba a permitir que huyera de aquella oportunidad única, del amor de su vida… Aunque eso significara entregar su corazón también a la pequeña sobrina que Ginny tenía a su cargo y desempeñar un papel al que creía que no volvería a enfrentarse: el de ser padre.