Deseaba serlo todo en la vida de Meg.
Ben era el mejor amigo de Meg desde la infancia. A excepción de un beso que no había olvidado, su relación había sido absolutamente platónica; pero habría hecho cualquier cosa por ella. Cuando Meg le pidió ayuda para ser madre, Ben se la ofreció sin dudarlo. Sin embargo, poco después, descubrió que quería ser algo más que un amigo. ¿Podría convencer a Meg de que estaba preparado para sentar cabeza y ser un padre de verdad?