Había conocido a su hombre ideal
Marnie Franklin, casamentera profesional, estaba encantada de haber encontrado a un hombre estupendo para Helen, su madre viuda, hasta que se enteró de que el hijo de ese hombre era Jack Knight, un guapo empresario con mucho éxito al que ella hacía responsable de la quiebra del negocio de su padre. Pero como Helen estaba verdaderamente loca por él, Marnie no podía dejar de relacionarse con Jack si no quería destruir la bien merecida felicidad de su madre.
Jack pronto la obligaría a reconsiderar lo que había sucedido años antes, pues estaba resuelto a demostrarle que tenía a su príncipe azul delante de las narices.